El próximo viernes 25 de Febrero a las 20:30, nos visitará Pascual García, prolífico escritor moratallero que presenta su última creación,una novela que trata sobre ciertos sucesos acaecidos durante nuestra guerra civil y al final de la misma, de los que todos hemos oído hablar o de los que hemos leído en diversas publicaciones. Os esperamos
7 comentarios:
No leer sí no lo has terminado
Ayer terminé la novela,he de reconocer que he tenido momentos en los que se a empalagado,pero también ha habido momentos geniales.En general creo que está muy bien escrita,en humilde opinión claro, lo mejor la primera emboscada y el final cuando Aníbal visita a la madre.
PUES ESAS COSASA NO SE HACEN, PORQUE AUNQUE NO LO HAYAMOS TERMINADO LO VAMOS A LEER SEGURO PORQUE LA NATURALEZA HUMANA ES MUY COTILLA, ASI QUE LO HE LEIDO. ESPERO QUE NO ME HAYA FASTIDIADO MUCHO EL FINAL. SOY QUICO.
Acabado, por los pelos, pero acabado. A ver, mi primera impresión al cerrar el libro es que he leído lo mismo una y otra vez, como si la estructura de la novela fuera una suerte de cinta de Moebius que se enrosca sobre sí misma, con lo que estás pasando continuamente por lugares comunes. Mi impresión es que está muy bien escrita, demasiado quizás, lo que puede que dificulte un poco su lectura. Aunque le reconozco al autor la habilidad de usar una historia "de aventuras" que engancha como hilo conductor para acabar dibujando un paisaje nítido de personas y lugares, que es el verdadero protagonista de la novela. Hablaremos más largo y tendido del tema con el autor.
Entiendo perfectamente que a veces se empalague y agradezco lo de los momentos geniales y la afirmación de que está bien escrita, pero Aníbal no visita en ningún momento a su madre, entre otras cosas, porque ni siquiera la nombra.
Agradezco también a Manuel su comentario, en varios puntos muy acertado. La novela moderna, como la propia vida, tiene a veces esa estructura de cinta de Moebius, de la que parece que no vayas a salir nunca y con la impresión de que estás asistiendo a repeticiones de hechos y de sensaciones que ya has vivido. Agradezco lo de bien escrita, pero yo creo que nunca está demasiado bien escrita una historia, aunque dificulte un poco su lectura. Quiero creer que a un lector exigente, a quien en realidad va dirigida esta novela, no le importa las dificultades de su lectura si puede disfrutar con ella. He querido y así lo han señalado algunos críticos cuyo juicio estimo en especial que mi novela estuviera escrita en un lenguaje ágil y denso a la vez, lleno de poesía pero sin abandonarla aventura.
Me gustaría que leyerais la reseña que ha dedicado esta mañana el catedrático de la Facultad de Letras de Murcia, Manuel Martínez Arnaldos a mi novela "Solo guerras perdidas" en la Opinión de Murcia, aunque solo es una de las diez o doce extraordinarias críticas que ha recibido el libro, siempre es posible aprender algo, aunque parezca imposible. Esta es la dirección:
http://www.laopiniondemurcia.es/opinion/2011/03/23/maquis-pascual-garcia-gimenez-bartlett/310826.html
Me alegro. No sabe usted cuantísimo me alegran todas las críticas positivas a su novela. Es estupendo que hablen bien de uno y que reconozcan el esfuerzo que supone escribir. Y las críticas negativas, y las neutras, porque toda crítica tiene en el fondo algo bueno, incluso las de los lectores, que sin ser catedráticos, gastan su dinero en leer algo que usted ha escrito. Además, siempre había creído que un autor escribe para el público (su público) y no para gustar a los críticos. Y debo reconocer, después de leer la crítica vinculada, que aún no tengo muy claro qué es lo que podemos aprender de ella, aparte claro está, del hecho de que al catedrático le gusta más su obra que la de Giménez Bartlett. Enhorabuena de nuevo por su libro y por sus críticas; siga usted escribiendo que nosotros seguiremos leyéndole y opinando al respecto. Un abrazo.
Yo no tengo “mi público”; eso lo tienen las viejas folclóricas y los malos toreros; yo aspiro humildemente a que me lean todos, de un modo inteligente y gozoso, pero no he hecho ni haré concesiones al gran público. Cada cual es libre de comprar o acudir a una biblioteca para leer el libro que quiera, o de jugarse ese dinero al tute subastado, que es juego de mi predilección; le caiga bien o mal su autor. Eso no tiene importancia. También los catedráticos de literatura y los críticos literarios, aunque no lo parezcamos, somos grandes lectores en nuestros ratos libres. En cuanto a las opiniones, alguien ha dejado ha escrito por ahí que son como los culos, es decir, que cada uno tiene el suyo y, por eso no es más respetable. El gran Borges decía que, en ocasiones, la democracia es la dictadura de la mayoría. Y esto no es garantía de excelencia, que digamos. En fin, pelillos a la mar, y a leer que la vida son dos días.
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